
¿Qué es la hiperhidrosis?
La hiperhidrosis es una condición médica caracterizada por una sudoración excesiva que no siempre está relacionada con el calor o el ejercicio físico. Esta sudoración puede ser tan intensa que empapa la ropa, gotea de las manos o interfiere significativamente con las actividades cotidianas y la calidad de vida. Desde la Farmacia Soler Miret queremos indagar en las claves de esta patología:
Existen dos tipos principales:
- Hiperhidrosis primaria: sin causa médica aparente, generalmente focalizada (manos, axilas, pies, rostro).
- Hiperhidrosis secundaria: causada por una condición médica subyacente (como hipertiroidismo, diabetes, menopausia, etc.) y suele ser generalizada.
Causas y factores desencadenantes
La causa exacta de la hiperhidrosis primaria no se conoce del todo, aunque se cree que está relacionada con una sobreactividad del sistema nervioso simpático, que controla las glándulas sudoríparas. La genética también juega un papel importante, ya que muchas personas tienen antecedentes familiares.
En el caso de la hiperhidrosis secundaria, puede ser provocada por:
- Trastornos hormonales (como el hipertiroidismo)
- Diabetes
- Trastornos neurológicos
- Infecciones
- Medicamentos
Síntomas de la hiperhidrosis
Los síntomas más comunes incluyen:
- Sudoración excesiva localizada (palmas, plantas, axilas, rostro)
- Episodios frecuentes de sudor sin desencadenantes claros
- Manchas de sudor en la ropa
- Irritación o infecciones cutáneas por la humedad constante
- Ansiedad social o incomodidad por la condición
Diagnóstico
El diagnóstico suele ser clínico, basado en los síntomas del paciente. En algunos casos, se realizan pruebas como el test de almidón-yodo o el uso de papeles medidores para cuantificar la sudoración. Si se sospecha una causa secundaria, pueden requerirse análisis de sangre, orina o estudios de imagen.
Tratamiento
El tratamiento depende del tipo y la severidad de la hiperhidrosis:
- Antitranspirantes médicos: con cloruro de aluminio, aplicados tópicamente.
- Medicamentos orales: anticolinérgicos que reducen la actividad del sistema nervioso.
- Inyecciones de toxina botulínica (Botox): bloquean temporalmente los nervios que activan las glándulas sudoríparas.
- Iontoforesis: técnica que usa corriente eléctrica suave para reducir la sudoración en manos y pies.
- Cirugía:
- Simpatectomía torácica endoscópica (ETS): para casos graves y resistentes al tratamiento.
- Extracción de glándulas sudoríparas: en axilas.
Impacto emocional y social
La hiperhidrosis no es solo una cuestión física. Muchas personas experimentan ansiedad, baja autoestima, aislamiento social y dificultades laborales debido a su condición. Por eso, un enfoque integral que incluya apoyo psicológico puede ser clave.
Aunque a menudo se minimiza, la hiperhidrosis es una condición médica real que puede afectar profundamente la vida de quienes la padecen. Afortunadamente, existen múltiples tratamientos eficaces que permiten recuperar el bienestar y la confianza. Si crees que podrías estar experimentando hiperhidrosis, hablar con un profesional de la salud es el primer paso para encontrar alivio.

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